miércoles, 11 de septiembre de 2013

EL MITO DEL DIOS ANUBIS

Mito de Anubis

Tras el fallecimiento del faraón, Anubis, el Dios Chacal, protector de los muertos, esperaba paciente en la puerta de la necrópolis a que el alma del faraón saliera.


Anubis era el antiguo dios de la Duat. Anubis estaba relacionado no sólo con la muerte, también con la resurrección después de la muerte, y era pintado en color negro, color que representa la fertilidad. Era también el encargado de embalsamar los cuerpos de los faraones, guiarlos a la necrópolis y cuidarla con su vida. Los sacerdotes de Anubis usaban unas máscaras rituales con su figura en la ceremonia de embalsamamiento del faraón. También Anubis era el encargado de vigilar, junto a Horus, la balanza en la que se pesaban los corazones de los difuntos durante el Juicio de Osiris. Anubis coloca el corazón, el símbolo de lo que sintió, pensó, decidió e hizo el muerto en la balanza doble de Maat, la diosa de la verdad, de la justicia, es contrapesado con la liviana pluma de la verdad, para determinar si aprendió la lección que le tocaba, persigue Thot, un hombre con cabeza de Ibis, simboliza al único dio cuando multiplica los seres de cada creación, se pesa los resultados de cada decisión, se evalúa el comportamiento de cada circunstancias difícil de su destino, la lección esencial en esta reencarnación; el escribe el libro del destino, las transformaciones de cada espíritu en su proceso de evolución, el nombre que tomo, la forma que adopto, el sitio donde nació, las circunstancias que experimento y los resultados obtenidos. 

Una extraña figura con parte de distintos animales, observa, representan a las formas que ha encarnado el espíritu, sus distintos momentos de animalidad original, es la fuerza animal que impulsa al espíritu hacia la materia, la pasión, el deseo y la sensación del cuerpo; es la fuerza de Seth el lado oscuro de todo ser humano, que retrasa su proceso de evolución. El espíritu eleva las comprensiones verificadas por su personalidad temporal a su parte eterna y recibe de Thot un nuevo destino, una nueva lección, una nueva vida que vivir. Sale guiado por Horus, la luz de su propia conciencia, su lección definitiva al terminar su rueda de reencarnaciones porque todo lo ha aprendido, le indica que entre al santuario de su nuevo cuerpo, donde se encuentran las otras fuerzas que impulsa su conciencia, allí percibiendo se encuentra Osiris, la fuerza que impulsa el proceso hacia adelante, hacia la espiritualización y el abandono de las pasiones animales, lo acompañan Isis y Nepthys, sus conexiones con las sensaciones y emociones del cuerpo que ocupa en esta nueva vida a la que acaba de nacer.

Era también el protector de los sacerdotes embalsamadores, ya que él era el embalsamador de los dioses por haber ayudado a Isis a embalsamar a Osiris; de esta manera se hizo responsable de la evisceración del muerto y recibió el título de "El que preside la tienda divina", que es el lugar de embalsamación; o el de "El que está sobre las vendas". Es el dios de la modificación que acompañaba al difunto ante el tribunal. En su comitiva, según el Libro de los Muertos, tenía a siete espíritus (Amset, Hapy, Duamutef, Kebehsenuf, Maa-an-tef, Jerybakef y Mejenti-irti). Una vez se había reunido con el fallecido le transportaba en su barca por el rio hasta la orilla occidental.

Anubis acompaña de la mano al faraón donde Horus  le pide el corazón al difunto para  ponerlo en la balanza. Se iniciaba así el juicio por el alma del faraón. Osiris, Señor del inframundo, símbolo del bien, es el que preside. Anubis que ha guiado al faraón hasta la presencia de Osiris vigila cuidadosamente la balanza para que no se pueda manipular.

Una vez puesto el corazón del faraón en la balanza, la suerte está echada, no hay vuelta atrás, las acciones y la justicia del faraón se pone en tela de juicio.  Sí pesa más que la pluma de Maat o pluma de la justicia, el faraón podrá pasar al reino de los muertos, donde compartirá mesa con los dioses, al haber demostrado que es lo suficientemente justo como para permanecer entre ellos. Por el contrario, si vence la balanza hacia el lado del a pluma, el corazón será arrojado a La Gran Devoradora y posteriormente el resto del faraón será engullido.

Interpretación:

En el mito de Anubis podemos observar un aspecto que se repite a menudo en la mitología de distintas culturas: una persona que acompaña al lado desconocido, ayuda y guía en un proceso de cambio. Él es quien sabe el camino para que el alma del difunto no acabe vagando hasta el fin de los días. Le ayuda a entender el camino y en ocasiones le tutela para que vaya por el camino correcto. Este personaje lo hemos tenido a lo largo de nuestra vida todos alguna vez, es un amigo, un profesor, nuestro padre o madre, etc… esa persona que en momentos de oscuridad nos han guiado y acompañado para poder seguir adelante, para tener una vida más plena y conseguir ser más felices.

En el papel de Anubis,  destaca el mensaje de lo que uno aporta para entrar en otro mundo. El mensaje de que el cambio necesita que aportemos algo. Es importante identificar que aportamos nosotros al cambio, para que se produzca o para que nunca llegue. En el juicio se pone de manifiesto lo que ofrecemos nosotros, si es suficiente para que podemos hacer el cambio, para poder entrar en el reino de los dioses.

 Puede haber alguien que nos tutele, alguien que nos guíe hasta las puertas, pero en el momento del cambio (del juicio), estamos solos. Contamos con lo que aportamos y con lo que traemos en nuestro bagaje.

Aunque en muchos relatos religiosos se menciona la idea de un juicio y de demostrar las obras que hemos realizado, en el mito egipcio es distinto, nos exige aportar algo, no sólo demostrar lo anterior, si no aportar algo para el futuro. Ahí encuentro  lo interesante y rico del mito. Es fundamental ser conscientes de lo que aportamos nosotros al cambio, que ponemos de nuestra parte para que las cosas cambien y lo hagan como deseamos. ¿Por qué a menudo permanecemos sumergidos en una espiral, de la que no conseguimos salir? ¿Por qué no logramos ese cambio tan deseado? Me parece muy interesante explorar este punto.

No por casualidad he elegido este mito para empezar una nueva aventura, la de realizar y mantener un blog. Anubis simboliza la resurrección y la fertilidad y en mi caso esto es lo que me empuja a avanzar, a cambiar y buscar nuevas formas de expresar lo que me apasiona.

Otra interpretación posibles, si identificamos la balanza como una toma de decisiones, cuanto ponemos en juego y cuanto pesa en mis decisiones la justicia, entendida como razón y cuanto pesa el corazón como la parte emocional. Me parece interesante ser consciente del peso emocional que aplicamos a nuestras decisiones, si está equilibrado, si pesa mucho más la razón, o si pesa en exceso el corazón. Si tomamos las decisiones con un peso muy grande de la razón, el mito nos habla que acabaremos devorados por la bestia.

"Bienvenido seas, Anubis,
Tú que eres el Guía de las Almas de Heliopolis
Portador y dador de bendiciones,
Otórgame tu bendición.
Bienvenido seas, Anubis,
A ti que se te dio el nombre del Uno.
Tú nos has dado fortaleza.
Tú nos has dado los ríos y el agua.
Tú nos has dado ofrendas desde el momento de tu llegada.
Oh! Anubis, tú eres el Señor del aroma,
Quien nos da el incienso
Tú eres quien me protege contra todos los males
del día y de la noche."


No hay comentarios:

Publicar un comentario